Saludos,
He tratado algunos pacientes con miel y azúcar, con buenos resultados, tengo entendido que el azúcar trabaja por ser un agente higroscópico (que absorve agua) y por tanto no permite el crecimiento bacteriano.  En tanto que la miel tambie´n es higroscópica pero además tiene efectos antibacterianos por liberar peróxido de hidrógeno y por el pH.  Ambos los uso cuando trabajo con propietarios de bajos recursos y no pueden comprar los productos de última tecnología  (sin desdeñar a la miel y azúcar).Â
El problema que comentas, generalmente no lo he tenido por que les colocamos apósitos y vendajes estériles. Si aún así el paciente no coopera, le ponemos collar isabelino.
Hay un par de artículos sobre este tema en la revista norteamericana Compendium, son relativamente recientes (2004 ó 2003).  Conseguiré la fecha exacta.Â